Que le pase a una persona solo puede llegar a entenderlo, pero ya a dos personas juntas… deben ser de la misma familia.
Cuando el ser humano no deja de sorprender

Que le pase a una persona solo puede llegar a entenderlo, pero ya a dos personas juntas… deben ser de la misma familia.
Estrella su espectacular y casi único Gemballa Mirage GT (solo se han fabricado 25 unidades en el mundo) en las calles de Manhattan. Y es que el conductor quería aprovechar el confinamiento de la gente y el poco trafico de la ciudad, para dar un paseo a toda velocidad con su deportivo, pero la cosa no termina nada bien.
A este chavalín del vídeo le entra la tentación de llevarse los paquetes que han dejado el repartidor en la puerta de una casa. La cosa es que lo pillan con un «timbre-cámara» y es pobre intenta disimular como buenamente puede.