Unos padres con poca cabeza, habían dejado dentro del coche y a pleno sol a su hijo mientras hacían algunas gestiones.
Como te puedes imaginar la temperatura dentro del vehículo se dispara en esta condiciones y la vida del pequeño corría serio peligro.
Por suerte la rápida actuación de la gente, que fuerza las puertas del coche, logran sacar al niño y ponerlo a salvo.